Recuerda ese primer momento en que desempaquetaste algo nuevo—algo hecho solo para ti. Sentiste la emoción incluso antes de saber lo que podría hacer. Sentiste que alguien, en alguna parte, se preocupó lo suficiente como para obtener cada detalle correcto.

Pudo haber sido tu primer Walkman, tu primera consola, tu primer teléfono—tu primera pieza de tecnología que te hizo darte cuenta: esto no es solo un producto. Es la suma de innumerables elecciones de personas que se negaron a conformarse. Personas que miraron lo que existía y dijeron,

“Podemos hacerlo mejor.”

Se quedaron trabajando tarde para refinar una línea de código que nadie notaría, pero que todos sentirían. Se atormentaron por una curva, un color, un sonido—cualquier cosa para provocar esa emoción silenciosa dentro de ti cuando lo encendías. Escondieron pequeñas sorpresas, sabiendo que podrías encontrarlas, sabiendo que ese momento te haría sonreír, como a ellos.

Y cuando sostuviste ese producto, no solo estabas sosteniendo un objeto; estabas sosteniendo la dedicación de alguien. Su esperanza de que vieras el mundo un poco diferente, conectaras más profundamente o te atrevieras a probar algo nuevo. Esto no se trataba de hacer otro gadget. Se trataba de hacer algo digno de tu tiempo, tu confianza y tus recuerdos.

Ahora eres tú quien está construyendo lo que viene después. Llevas esa misma chispa hacia adelante. Recuerdas cómo se sentía cuando alguien se preocupaba lo suficiente como para crear lo extraordinario, y ahora es tu turno. Estás aquí para darle a la próxima generación ese mismo amor silencioso, esa misma sensación de posibilidad.

Celebramos a los pensadores, a los creadores, a los soñadores que dan a la tecnología su latido humano. Nos comprometemos a crear experiencias que lleven la creencia de que siempre es posible hacer mejor, y siempre vale la pena el esfuerzo.

A aquellos que se preocupan lo suficiente por BuildBetter:

Los vemos. Les agradecemos. Prometemos mantener viva esa chispa.